El tonto decide que no se fume en su bar.

Parece que al superhéroe tabaquil, dueño del asador de Marbella Guadalmina,  defensor a ultranza del tabaco y sus malos humos, patriota a más no poder, enemigo de todo lo rojo, y sentado a la derecha de Dios (o se cree Dios, no lo tengo muy claro) le ha dado finalmente por acatar la ley.
Este hombre inculto, que no sabía de donde venía la ley y todo lo hacía esa usarla para atacar al gobierno y demostrar su añoranza por antiguos tiempos, ha decidido bajarse los pantalones y prohibir fumar en su establecimiento, vamos hacer cumplir la ley. 
Ahora sólo falta por ver si el señor bobo, cumple con lo que dijo de irse de España si se le prohibía fumar.
Patético (a la par que con pocas luces) este señor. Esperemos que pague la multa que le impusieron.

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