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La constitución proclama el derecho a la huelga, pero también el derecho al trabajo, aunque para algunas personas estos derechos parecen no existir.
Primero decir que no hice huelga. No la compartía; compartía sus ideas, pero no su metodo, una huelga convocada tarde y mal, por sindicatos vendidos al poder.
Así que decidimos adelantar trabajo y cerrar, cogiéndonos un día de vacaciones. Mejor cerrar que evitar problemas con los piquetes.
A las 9:00 de la mañana los comercios de El Collado estaban cerrados (normal, pues la mayoría abren a las 10:00), y por lo único que se notaba que era día de huelga, era por la cantidad de pasquines de los sindicatos tirados por el suelo y por las pegatinas puestas en los cristales y puertas de los comercios (como se nota que ellos no tienen que limpiar ni quitar las pegatinas de cristales).
Así pues, el día transcurrió como un día normal. Aproveché para hacer recados en el centro de Soria, pues los comercios no secundaron la huelga; solo cerraron el rato que pasó la manifestación por delante de ellos, para evitar problemas, aunque supongo que a plena luz del día no volverían a ir poniendo pegatinas en los cristales de las tiendas, es mejor hacerlo de noche sin que te vean.
Ah, ni tampoco a plena luz del día se dedicarían a sellar con silicona las cerraduras de comercios o levantar tabiques en las puertas para impedir el derecho al trabajo de la gente (supongo que todo esto lo harían antes de las 0:00 horas, sino estarían trabajando un día de huelga). Mucho decir del derecho a la huelga y denunciar coacciones contra los trabajadores, pero NO respetan el derecho al trabajo de la gente que no comparte sus ideas. Vamos, fascismo puro y duro el de estos sindicatos.
Durante la manifestación, un chico nos dio un panfleto, en el que sin duda leí lo más coherente de todo el día, aunque se acerca a lo que pensaba yo sobre esta huelga y sus convocantes: http://noqueremosvolveralsigloxix.blogspot.es/
Y tiene razón, nos joden por todos los lados, unos que se aprovechan de los trabajadores y otros que no les defienden. Vaya plan
Y así transcurrió el día de huelga, lo que para unos ha sido un éxito rotundo de participación, para otros lo ha sido por la no participación. Números y más números, lo que somos para todos ellos, no personas.
